Cuando consumimos alimentos, estamos ingiriendo una gran cantidad de sustancias que nuestro aparato digestivo tiene que convertir, a través de elaborados procesos, en nuestra sangre y nuestro cuerpo físico.
La forma como el cuerpo logra convertir un plato de comida en nuestro corazón, manos, ojos, pies y multitud de órganos que conforman nuestra anatomía desechando, por otro lado, a través de la respiración, la piel, la orina y las heces toda una variedad de sustancias tóxicas o inservibles es una verdadera maravilla de la naturaleza humana que no deja de sorprendernos por su complejidad y eficiencia.
Cada vez que tomamos una comida, cualquiera que esta sea, todo lo que entra por la boca, bueno o malo, debe ser procesado para finalmente incorporar lo que nos nutre y desechar las sustancias que afectan el cuerpo. A pesar de la sabiduría innata de nuestros cuerpos, ellos no son capaces de procesar ilimitadamente lo que ingerimos si lo estamos sobrecargando con basura durante todo el tiempo en proporciones para las cuales no está diseñado Uno de los alimentos que afecta de forma muy negativa estos procesos es el trigo.
Hoy nos ocupamos de analizar el daño producido en las paredes intestinales por la gliadina que es la proteína del gluten del trigo. Esta proteína está contenida en todos los alimentos que llevan trigo, sin importar su variedad o color. Es igual si es un pan blanco o integral, una galleta, una torta integral, una pasta, un cereal o cualquier salsa o sopa que lo contenga.
Nuestros intestinos filtran una gran parte de las toxinas y elementos inservibles que consumimos y deben tener la posibilidad de dejar pasar a la sangre los elementos positivos y rechazar los negativos, lo que se podemos llamar una permeabilidad selectiva. La gliadina tiene la capacidad para hacer que los intestinos aumenten de manera exagerada la permeabilidad, con lo cual algunos elementos indeseables terminan en nuestro caudal sanguíneo al dejar de ser filtrados de forma adecuada por el aumento de permeabilidad intestinal.
Lo que sucede dentro de nuestra sangre, cuando estos elementos no deseados llegan allí, es que el cuerpo ataca estos invasores produciendo lo que se conoce como una reacción autoinmune en la cual el sistema inmunológico ataca sus propios órganos, es decir el cuerpo se ataca a sí mismo mediante inflamación para defenderse de estos invasores en la sangre.
Hay una larga y preocupante lista de enfermedades autoinmunes entre ellas la artritis reumatoide, el lupus, la enfermedad de Hashimoto, la diabetes tipo 1 y la enfermedad celíaca que están creciendo sin pausa en el mundo moderno.
De hecho, si se suman las enfermedades autoinmunes en conjunto son ya la tercera causa de muerte en el mundo occidental.
Estudios recientes apuntan a que la gliadina (proteína del trigo) desencadena la producción de Zonulina, una proteína que regula la permeabilidad intestinal. Cuando la Zonulina se produce en cantidades excesivas se deterioran las juntas entre las paredes intestinales dejando que proteínas no deseadas como la gliadina se puedan meter dentro de nuestra sangre ocasionando los problemas inmunes arriba descritos.
Además de la gliadina, hay algunos agentes infecciosos como el virus del cólera o la disentería que pueden producir un efecto similar en la permeabilidad intestinal generando problemas inmunológicos como los aquí mencionados y que son bastante conocidos en la comunidad médica cuando estos virus atacan.
Por el contrario, muy pocos profesionales de la salud, asocian el consumo de trigo con la perdida de permeabilidad de los intestinos en sus pacientes y con la pandemia de enfermedades autoinmunes que hoy nos atacan sin distinción alguna.
Tenemos en nuestras manos la información y la posibilidad de evitar largas y complejas enfermedades degenerativas de tipo autoinmune.
Evitar o reducir al máximo posible el consumo de trigo, en cualquiera de sus formas, es la manera de protegernos de ellas.
En el mundo de hoy el trigo es omnipresente, con lo cual no es tan fácil dejarlo de lado. Se requiere un esfuerzo consciente para cambiar hábitos y reemplazar productos que están muy arraigados en nuestra cultura como el pan, las pastas, las galletas, pasteles y demás harinas de trigo.
La buena noticia es que cada vez es mayor la oferta de productos sin gluten que hacen mas fácil la transición, como pastas o cereales de arroz, trigo sarraceno, mijo, quínoa, papas y patata dulce (batatas) entre otros.
Para una mayor información sobre el gluten lo invito a leer el post del blog el poder del alimento titulado «gluten y trigo: un enemigo omnipresente» http://bit.ly/1m2jpeZ
Me interesa aprender sobre Hipotiroidismo y su curacion para poder ayudar a mi hijo.Ademas en mi familia hay antecedentes de cancer.Gracias por la valiosa informacion.Bendiciones infinitas.Un abrazo.
Muchas gracias por su amable comentario y sus buenos deseos. Quiero decirle que cuando una persona se alimenta verdaderamente bien y hace ejercicio físico de forma regular, el comportamiento de la tiroides se balancea y suele mejorar la condición de hipotiroidismo. Tendremos en cuenta su comentario para próximas publicaciones en este blog sobre este tema importante. Tambien le recomiendo leer el libro «el poder del alimento» ya que le ayudará a comprender mejor lo que hay detrás de una alimentación saludable. Saludos cordiales
Hola buenas tardes, tengo dos hijos pequeños( 3 y 6 años) a los q les encanta las salchichas de carne, poco a poco estoy intentando acostumbrarlos a salchichas de seitan ecológicas q parece también les gusta, mi pregunta es: son saludables estas salchichas?, según tengo entendido el seitan es puro gluten de trigo.
Gracias y felicidades por el blog.
Hola, es una buena idea ir reemplazando las salchichas de carne por algo mas saludable, no obstante, el seitan no es efectivamente la alternativa. En el mercado se encuentran salchichas vegetales que no llevan gluten, como salchichas de soja o de garbanzo. Cualquiera de ellas será una mejor opción.
Hola, buen día Dr. tengo un sobrino que tiene un año que le detectaron Colitis eosinofilica, y casi todo lo q come le cae mal, esta perdiendo mucho peso, tiene 17 años y ha tenido varias recaidas le tienen q inyectar en la vena no recuerdo como se llama el medicamento pero se pone amarillo. Dice el Dr. q todavia no existe cura, quisiera saber si usteded puede hacer un tema sobre esta enfermedad, se lo agradeceria mucho. de antemano muchas gracias por todas sus publicaciones que nos orientan.Saludos desde México.