Asombrosos avances científicos nos están revelando nuevas formas en las que las plantas ofrecen una protección sin igual a nuestra salud; casi a diario se publica algún hallazgo en este sentido. Los alimentos sin procesar del reino vegetal contienen miles de componentes conocidos y aún por conocer que son esenciales para mantener nuestra salud y maximizar nuestro potencial genético.

Se ha descubierto un verdadero arsenal de compuestos naturales en las plantas que eliminan las toxinas de nuestro cuerpo y nos protegen contra la degeneración celular: a este grupo de compuestos químicos naturales se les llama fitonutrientes o fito-químicos.

Estos nutrientes tienen efectos muy importantes en la fisiología humana, tanto así que de no consumirlos se corre el riesgo de acelerar la muerte prematura por cáncer y arterioesclerosis, dado que estos compuestos se han relacionado como protectores contra estas enfermedades.

Comer una buena variedad y cantidad de vegetales y frutas crudos, o apenas cocidos, es la única forma de asegurarse una cantidad suficiente de estos nutrientes esenciales para la salud. Ninguna vitamina o suplemento añadido a la comida puede reemplazar a los fitonutrientes.

Vegetales crucíferos como el brócoli o el repollo, para sólo mencionar un par de ejemplos, contienen isotiocianatos, fito-químicos que activan las enzimas en las células que limpian el cáncer. En un estudio publicado en Journal of the National Cancer Institute de Estados Unidos se afirma que los hombres que consumen tres o más porciones de vegetales crucíferos al día reducen el riesgo de cáncer de próstata en un 41%.

Los vegetales verdes, la cebolla y los puerros contienen fito-nutrientes organosulfúricos que inhiben la aparición de cambios anormales en las células que eventualmente conducen al cáncer.

Algunos de los fitonutrientes que poseen propiedades anti-cancerígenas que se han descubierto hasta ahora son: flavonoides, ácido cafeico, catechins, coumarins, isoflavonas, isocianatos, lignanos, liminoides, pectinas, fitoesteroles, inhibidores proteásicos, saponinas y esteroles.

Estos fitonutrientes tienen varios mecanismos de acción: inhiben el envejecimiento celular, inducen las enzimas que nos desintoxican, agrupan los cancerígenos en el aparato digestivo para ser expulsados y alimentan los mecanismos de reparación celular.

En particular, los fitonutrientes tienen un valor sobresaliente en la prevención y cura del cáncer, mediante las siguientes funciones:

1. Limpian y desactivan los agentes que causan el cáncer y bloquean los procesos de iniciación que causan daño al dna de nuestras células.

2. Alimentan los procesos de reparación celular haciendo que las células vuelvan a su estado normal una vez que su dna ha sufrido algún daño.

3. Impiden la proliferación de células con daño en su dna.

4. Cuando hay células precancerosas, protegen su dna impidiendo un daño mayor.

5. En las células con cáncer inhiben su proliferación hacia otras células normales.

Todo lo anterior puede ser uno de los motivos por los cuales la dieta inventada por el Dr. Gerson para curar el cáncer mediante el consumo de vegetales y zumos en su mayoría crudos, hace casi setenta años, haya tenido éxito en muchos pacientes, aun antes de conocer la existencia de los fitonutrientes y su acción en la prevención y reparación del daño celular.

Los fitonutrientes también juegan un papel relevante en la protección cardiovascular: al evitar oxidación de las proteínas de baja densidad (LDL), reducen la síntesis y utilización de colesterol y trabajan de forma positiva sobre la presión sanguínea así como sobre la capacidad de coagulación de la sangre

Las antocianinas, otros fitonutrientes conocidos restringen la actividad de la α-glucosidasa, lo que determina una disminución de los niveles de glucosa en sangre por lo cual son vitales en la lucha contra la diabetes.

Otros ejemplos de fitonutrientes y los alimentos en los que están presentes son:

Los carotenos, pigmentos amarillos, rojos y de color anaranjado que se encuentran en el tomate, perejil, naranja, pomelo rosado, espinacas.

Licopenos presentes en el tomate, y el ají.

Limonoides y Limoneno estimulan la producción de enzimas y son maravillosos como antisépticos, se obtienen de forma mayoritaria de los limones, naranjas, pomelos, mandarinas y otros cítricos.

Los flavonoles y las mencionadas antocianinas se encuentran en manzanas, cebollas rojas y amarillas, brócoli, uvas rojas, jugo de uva y en el vino tinto.

Quercetina,  se encuentra en buenas cantidades en la col de Bruselas, cebolla, manzana, en los productos de las abejas como el polen y el propóleo, en el rábano, calabaza, brócoli y en la coliflor. Estupendos anti-inflamatorios y antioxidantes protegen también contra cataratas.

Otros como los indoles, ditioltionas e isotiocianatos se encuentran en el repollo, brócoli, coliflor, puerros y cebollas.

Los ya famosos lignanos están presentes en las semillas de lino, en la avena, la cebada y el salvado de trigo.

Las isoflavonas se encuentran de manera primordial en la soja, los guisantes, las habas, el garbanzo, las lentejas, las judías verdes, el diente de león y la linaza. Su acción es vital en la producción de enzimas anticancerosas, inhiben la producción de estrógeno y ayudan a detener la pérdida de masa ósea.

El ácido caféico se encuentra principalmente en el propóleo, el té negro y el verde.

El ácido fenólico esta presente en la berenjena, la soja, el brócoli, la col, todos los cítricos, los granos integrales, el perejil, los tomates, el pimiento, la zanahoria, las moras, las frambuesas y otros frutos rojos. Su efecto en el organismo es antioxidante, favorece la actividad enzimática, inhibe la producción de prostaglandinas.

Como podrá ver, con tan solo unos ejemplos, los fitonutrientes son vitales para conservar una buena salud y elementos de avanzada en la promoción de la longevidad en el cuerpo humano.

Recuerde que los fitonutrientes solo están presentes en los alimentos de origen vegetal en su estado crudo o, en algunos casos levemente cocido, por tanto la ingesta de estos alimentos sin cocción y sin procesos industriales destructivos es la única forma de garantizar que nuestro cuerpo obtenga sus beneficios en la prevención del cáncer, enfermedades del corazón, diabetes y otras enfermedades degenerativas.