¿ Cuando usted lleva un trozo de carne a su boca, sabe usted las consecuencias que ese acto tiene para su cuerpo y las que su producción en fábricas de animales tiene para la salud del planeta y para el sufrimiento animal ?
La respuesta mas probable es que usted no conozca lo que sucede antes de que esa carne, llegue a su plato y que también desconozca lo que consumirla va indefectiblemente a producir en su cuerpo.
Vivimos en una sociedad donde el consumo de animales y productos lácteos es la norma. Estamos literalmente adoctrinados a comer la carne de muchos animales y beber la leche que las vacas de forma natural producen para alimentar sus crías, no para alimentar seres humanos.
Somos el único animal, entre millones de ellos sobre la tierra, que se toma la leche de otra especie para alimentarse, aún después de su destete el hombre occidental sigue consumiendo leche de otra especie diferente a la suya.
Para consumo humano solo en los Estados Unidos se matan 28,000 millones de animales cada año. 10,000 millones de animales terrestres y 18,000 millones de seres marinos.
Nunca antes en la historia el hombre ha consumido una cantidad tan brutal de animales y nunca antes ha bebido leche como ahora. Es toda una odisea encontrar una comida que no contenga leche o queso.
¿Estamos fisiológicamente diseñados para consumir estos alimentos ? No.
Nuestra anatomía es la de un animal vegetariano, tal como es la de los chimpancés con quienes compartimos una conformación genética casi idéntica.
Sudamos por los poros, tenemos un intestino largo, enzimas digestivas para carbohidratos en la saliva, mandíbulas que se mueven en los dos sentidos, a diferencia de los carnívoros que solo los pueden mover en un sentido, carecemos de garras o de la estructura dental de un carnívoro. Los ácidos de nuestro estomago son veinte veces menos fuertes que los de un carnívoro y tenemos un elaborado sistema para digerir almidones, propio de un ser herbívoro.
Aparte de las disertaciones fisiológicas, lo que hoy está claro es que la ciencia disponible nos muestra sin lugar a duda alguna que la carne y los productos animales, en las absurdas cantidades y en las condiciones en que se consumen hoy, generan enfermedad y empeoran la calidad de vida del ser humano.
Las conclusiones de El estudio de China y muchas otras investigaciones de trascendencia que relaciono en el libro «el poder del alimento» al respecto del consumo de carne y leche son contundentes: el consumo de proteína animal aumenta significativamente el riesgo de contraer cáncer, enfermedades del corazón y todas las demás enfermedades degenerativas. Las diferencias en salud entre las poblaciones vegetarianas y las omnívoras son dramáticas.
La pandemia de enfermedades que se ha generado en el ultimo medio siglo proviene de forma primordial del consumo de carne, huevos y lácteos.
Las enfermedades del corazón, inexistentes hace tan solo 100 años, son ahora la principal causa de muerte en el hemisferio occidental. El cáncer se multiplica ahora a tal velocidad que una de cada tres personas va a contraer la enfermedad. Osteoporosis, Alzheimer, artritis, diabetes, lupus y una larga lista de enfermedades degenerativas han crecido de manera exponencial por cuenta del consumo de carne, leche, pescados y huevos productos de la industria de explotación animal mas pavorosa que se haya visto.
¿Y dónde está la proteína si no consumo animales?
No hay un mito más arraigado en el mundo alimenticio actual que el de las proteínas. Madres, padres, abuelos y todo el entorno familiar, médicos y muchas publicaciones hablan de la importancia de comer proteína.“Come carne y toma mucha leche para que puedas crecer sano y fuerte”, es una frase que escuchamos con demasiada frecuencia.
Sin embargo, nada más lejano de la realidad. Es cierto que necesitamos proteína en nuestras dietas, pero las plantas tienen proteína más que suficiente para nuestras necesidades.
No requerimos para nada comer animales ni mucho menos productos lácteos. Tenga en cuenta que todos los animales que los seres humanos se comen han derivado sus proteínas de comer pasto y cereales. Es allí de donde ellos obtienen los aminoácidos, todos sin excepción vienen de las fuentes vegetales que son las únicas capaces de transformar la energía del sol en alimento.
Cualquier combinación adecuada de alimentos naturales proporcionará todas las proteínas necesarias, incluyendo los ocho aminoácidos esenciales. Con una buena combinación de vegetales, cereales integrales, legumbres o frutos secos, la dieta será rica en proteínas, sin necesidad de ninguna fuente animal y nos habremos librado de la carga de enfermedades degenerativas consecuencia de este absurdo, inconsciente y muchas veces irresponsable consumo de animales.
Pongámonos ahora en el lugar de los animales. Inocentes criaturas de la naturaleza sufre el esclavismo al que el ser humano los ha sometido para su placer.
¿Ha pensando alguna vez que la manera como tratamos a una vaca en la moderna industria de la leche y la carne? en palabras del activista Gary Yourofsky, la manera como esta maquiavélica industria opera equivale a que a usted de repente la violaran para que quedara embarazada y produjera leche, luego la confinaran en una fabrica de leche sin posibilidad de moverse y la alimentaran con soja, trigo, avena y maíz para engordarla lo más rápido posible ( sin importar que esos no son los alimentos para los cuales usted esta diseñado biológicamente).
Una vez usted da a luz le arrebaten su cría e inmediatamente la violen de nuevo para continuar este ciclo de sufrimiento hasta que ya no sea viable para producir leche y entonces la trasladen hacinada en camiones a un matadero para colgarla viva y sacrificarla en frente de todos sus congeneres.
¿Ha pensado que la carne que usted come es el resultado de esta cadena de sufrimiento?
Pero no son solo las vacas las que sufren, los pollos que se crían estabulados en fábricas a la que solo les interesa que se engorde rápido para matar lo antes posible el animal, fábricas en las que se les deja la luz encendida 24 horas para que no paren de comer y engorden hasta que sus patas se rompan por la cantidad de peso.
Si eso son los pollos de las alitas o los filetes que se consumen y que nos venden con publicidad que nunca muestra la realidad.
Los cerdos a quienes se castra y se confinan también sin posibilidad de moverse para que engorden hasta morir son otras de las víctimas de esta inconsciencia.
Los peces son arrasados de su habitat hasta el punto de llevar a muchas especies a su extinción y hoy, cada vez mas, son producidos en criaderos artificiales confinando también a estas especies al encierro, la pésima alimentación y la muerte.
Por ultimo, como si las consideraciones de su salud y las del sufrimiento animal fueran pocas, es necesario saber que el daño que la crianza de animales para consumo humano está haciendo al planeta Tierra es en verdad escalofriante.
El 18 % de las emisiones de gases de efecto invernadero proviene de la crianza de animales, mas daño medioambiental que la suma de todos los coches, aviones y trenes del planeta juntos.
Las selvas se arrasan para sembrar soja, trigo y maíz transgénico para alimentar estos animales. Los acuíferos de la tierra se contaminan con los pesticidas y los residuos de la crianza de animales, contaminación que termina en el mar destruyendo también el habitat de los peces. ¿Sabe usted que los peces están contaminados con elevadas cantidades de mercurio y metales pesados y que dicha contaminación proviene en muy buena parte de la industria de pesticidas utilizados para estos monocultivos?.
Las abejas están en peligro de extinción por esta misma razón y sin ellas no hay agricultura posible.
Son pues muchos los factores que nos deben hacer pensar sobre nuestra responsabilidad al momento de elegir lo que comemos.
La buena noticia es que en el reino vegetal encontramos todo lo necesario para nutrirnos y vivir sin enfermedades degenerativas.
Cada vez más se encuentran opciones para comer de forma deliciosa y nutritiva.
Solo hace falta querer cambiar y ensayar un nuevo estilo de alimentación que va, sin duda, a mejorar su energía y su salud, pero que además va a evitar el espantoso sufrimiento animal y va a garantizar que sus hijos y nietos puedan disfrutar de este maravilloso planeta.
Recomiendo a quien quiera profundizar en este tema de maltrato animal y alimentación ver el video de Gary Yourofsk en el siguiente vínculo: http://www.adaptt.org/life-changing-speech.html
Tal vez la proxima vez que vaya al supermercado y vea un trozo de carne estupendamente presentado, recuerde de donde proviene lo que está ante sus ojos y cuales son las consecuencias que conlleva su decisión de consumo.
maravilloso datos sobre el consumo de carnes. Hay razones para pensar que el consumo de carne, es el causante de los dolores en las articulaciones . Mil gracias.
Me alegra que le haya sido útil el post. Efectivamente la mayor parte de los problemas de enfermedades degenerativas, entre las que se encuentran las de articulaciones, provienen del consumo exagerado de fuentes animales incluyendo los derivados lácteos. Las harinas refinadas y el azúcar están también en ese grupo.